Proyecto Atalaya

Carlos Castilla del Pino

San Roque (Cádiz), 1922 – Castro del Río (Córdoba), 2009

Mente y dignidad

Neurólogo, psiquiatra y escritor español. Cursó sus estudios en los Salesianos de Ronda y los Escolapios de Sevilla y obtuvo la carrera de Medicina en la Universidad Central de Madrid. Su temprana vocación científica estuvo marcada por la admiración que le profesaba al doctor Santiago Ramón y Cajal. Tras la Guerra Civil, donde algunos de sus familiares fueron asesinados, comenzó su carrera docente como adscrito a la cátedra de Patología Médica de Agustín del Cañizo. Entre 1943 y 1946, fue alumno interno del Departamento de Psiquiatría del Hospital Provincial de Madrid, dirigido por el profesor Juan José López Ibor.

En paralelo a su trabajo como médico interno en el hospital madrileño, donde conocería al neurólogo Manuel Peraita, fue colaborador del Departamento de Histología del sistema nervioso del Instituto Cajal de Madrid, que dirigía el profesor Sanz Ibáñez. Allí conocería a dos discípulos de Ramón y Cajal, Jorge Francisco Tello y Fernando de Castro, de quienes tuvo el privilegio de aprender la preparación puzzelada en láminas muy extensas filocorticales del córtex cerebral.

Realizó su tesis doctoral con el catedrático de oftalmología Buenaventura Carrera, titulada ‘Fisiología y patología de la percepción óptica del movimiento’. En esa temporada, investigó la distinción de esquizofrenias encubiertas por otras patologías. A partir de 1949, fue director del Dispensario de Psiquiatría de Córdoba, donde también ejerció como catedrático de esta disciplina. Entre 1946 y 1966, dedicó buena parte de su tiempo a la investigación neuropatológica y publicó numerosos trabajos sobre neurología patológica experimental. Destacó ‘La unidad sensoriomotriz en la esfera óptica’, difundido en las prestigiosas Actas Lusoespañolas de Neurología y Psiquiatría. Otros como ‘Los dinamismos de la tristeza y de la inhibición en los enfermos depresivos’ contenían los gérmenes de una nueva manera de entender la psiquiatría.

En 1949, se preparó las oposiciones para ser nombrado jefe de los Servicios Provinciales de Psiquiatría e Higiene Mental de Córdoba, cargo que desempeñó hasta su jubilación en 1987. Debido a su ideología comunista, se le negó en varias ocasiones la cátedra de Psiquiatría durante el régimen de Franco, hasta que el gobierno socialista de Felipe González le concediera la cátedra extraordinaria de Psiquiatría y Dinámica Social en la Facultad de Medicina de Córdoba a propuesta de la Universidad de Córdoba. Sus últimos años fueron realmente duros, pues varios de sus hijos se suicidaron. Fue nombrado hijo predilecto de Andalucía en 1985 y doctor honoris causa por la Universidad de Cádiz en 2004. Falleció en mayo de 2009, víctima de un cáncer.

Fue autor de veintiún libros de psiquiatría, seis libros de ensayos y ciento ochenta y seis monografías neuropsiquiátricas publicadas en revistas especializadas, dos novelas y una autobiografía en dos volúmenes. Sus méritos científicos, así como su talento como ensayista, el valor de su lenguaje y estilo y el testimonio histórico de la España de posguerra a través de sus dos libros de memorias, le valieron un sillón en la Real Academia Española de la Lengua desde 2003.

En detalle:
· En su primera etapa, se dedicó principalmente a la neuropsiquiatría y la neuropatología, evolucionando desde la psicopatología al análisis existencial.

· Encabezó un movimiento científico e intelectual para humanizar el tratamiento del enfermo mental.

· Dentro de su faceta de escritor, escribió dos novelas en 1991 y 1999 respectivamente: 'Una alacena tapiada' y 'Discurso de Onofre'.

· Su defensa de la democracia durante el franquismo le valió el apodo de 'el psiquiatra rojo'.

Newsletter

He leído y acepto el Aviso legal